Entrevista – Trentemøller: música con honestidad

Por: Mauricio Atencia  

“Siempre he estado fascinado por la música de Trentemøller, y estoy a la espera del nuevo álbum. Sería genial si podemos lograr algo con él” le decía a Bruno, un amigo español que sintió el feeling colombiano e inmediatamente me compartió, en exclusiva, Fixion, el nuevo disco del danés que verá la luz en In My Room, su sello. “Estoy 100% seguro que lograremos algo con él” me contestó, dejándome en espera para confirmar el día que me reuniría con Anders, para entender su forma de componer sonidos y saber que primero viene la voz y luego el ritmo. Algo raro, sí, pero esa es la forma en que el maestro detrás de pistas como ‘Evil Dub’, ‘Shades of Marble’, ‘Candy Tongue’, ‘Polar Shift’, ‘What Else Is There (Trentemøller Remix)’, ha decidido abordar sus ideas.

“Estamos ante un disco donde (puede ser que) a la primera escucha resulte menos detallista de lo que realmente esconde” informaba el comunicado de prensa del disco, asegurando que “Fixion es de ese tipo de trabajos que con el tiempo mutan al mismo tiempo que libera nuevas complejidades. A cada escucha, es una nueva oportunidad para entender la obra de manera diferente”, y así lo hace entender el danés. Es necesario oír el disco más de una vez para entender que fue hecho para la hora mágica en la que la noche y el día aún está por encontrarse.

El 16 de agosto, a la 1:00 p.m., fue la fecha y hora pautada con Anders, para reunirnos en Skype y lanzarle todas las preguntas que pudiera, en un lapso de 20 minutos.

Mauricio: ¿¡Hola!?

Anders: Hola, Hi… disculpa, no sé qué sucedió con Skype.

Mauricio: Tranquilo…

Anders: Lo siento, tenemos pocos minutos para hablar. Debo hacer otra entrevista en un rato…

Mauricio: Muy bien. Empecemos. ¿Qué momentos o situaciones difíciles marcaron el crecimiento de Trentemøller?

Creo que hay muchas partes que marcaron mi vida y mi carrera. Pero, definitivamente, el momento que más me ha marcado como artista, ha sido el lanzamiento de mi primer álbum, el cual considero que tuvo algo especial, porque antes de eso, solo había lanzado algunas cosas. Con el disco, quería mostrar lo musicalmente instruido que estaba.

Muchos lo recuerdan como alguien que le añadió a la música electrónica, un estilo más íntimo, ya sea por las voces, el solo de alguna guitarra o los bajos hipnóticos con tinte pop, rock y hasta indie. ¿Qué cosas buenas le dejó ese periodo?

Es cierto que mis sonidos se inclinan hacia la música electrónica, pero lentamente se ha convertido, simplemente, en música, pero en música de buena calidad. Ya no estaba tan solo en la escena de la electrónica, porque de alguna manera, sentí que esto me había puesto dentro de una caja en la que realmente no quería estar. Yo quería ser de mente abierta y hacer solo la música que, de alguna manera, me encantaba y perseguía. Por eso me siento bien el haber salido -un poco- de la caja que contiene a la música electrónica para poder tocar en vivo con mi banda.

He tratado de seguir lo que la música me ha dicho qué hacer, entonces si yo escribo algunas canciones, que sean más indie, hasta de pronto con algo de folk, es porque las canciones en sí, necesitan tener esa exploración con esos ritmos. Yo trato de no pensar mucho en si va a ser indie o no. Para mí, es más importante que cada canción reciba el sonido correcto, sin embargo, el verdadero reto después de escribir la canción, es organizarlas de acuerdo a su congruencia sonora para crear un álbum, ya que este siempre debe tener un sonido especial que extraiga su esencia. La verdad, no sería bueno tener en un álbum o una canción que sea muy jazz o que sea muy folk, porque quizás no encajan juntas. Definitivamente, ese es el mayor reto: hacerlas encajar.

¿Cómo llega a sentir que es hora de alejarse de la música bailable para ofrecer sonidos más teatrales, más para la mente, para el viaje, pero que en cualquier momento pueden hacer mover a alguien?

Bueno, eso es algo que sucede muy naturalmente. Desde hace diez años que saqué mi álbum debut The Last Resort, incluía sonidos muy electrónicos, pero también, guitarras y otros elementos. Ahora, pienso yo, es un mix de los dos elementos. Eso está bien, porque realmente yo quería que fuera así. Para mí, todo se trataba de ser de mente abierta y no poniendo música en diferentes cajas. Algunas veces, uno puede más de la mitad de las personas, ¿sabe? cuando empecé a tocar con mi banda, muchos entendieron lo que musicalmente estaba tratando de hacer, pero había otra gente que esperaba que mi sonido fuera más “club electronic”, y de repente, llegué con una banda completa acompañado por un guitarrista y baterista. Creería que esas personas se sintieron confundidas en un principio, pero ahora, en los últimos cinco o seis años, hemos recuperado muchos fans.

Antes de entrar en detalles sobre su nuevo disco… ¿Qué le dejó Lost?

Fue muy bueno, porque tuve que cambiar la manera de iniciar mis composiciones y aprendí que para el próximo álbum -Fixion-, debía tener menos colaboraciones. De alguna manera, sentí que el álbum debía tener una sola voz, no cinco o seis. Al principio, mi idea era solo incluir a Marie Fisker, que se había presentado previamente en vivo conmigo. Además, creía que ella debía ser la única vocalista en el álbum, pero después también incluí a Jehnny Beth, y pudimos sacar dos canciones. Creo que ahí radica la gran diferencia entre Lost y Fixion, que está más centrado en dos vocalistas.

“Lo bonito de lo instrumental es que no tiene vocales que le dicten un guión, porque la música habla su propio lenguaje”

Si le digo que ‘Never Stop Running’, define casi que la mitad de Lost, y que funciona como un avance de Fixion, ¿qué diría?

No creo que realmente sea así, porque es una gran diferencia en la vibra de Fixion. Aunque las personas ven la música de diferentes maneras, realmente no veo la conexión entre ‘Never Stop Running’ y Fixion, pero claro que la vibra y la melancolía de las dos canciones, es algo que es muy típico de mi sonido; es más oscuro y de estilo escandinavo, creo yo. También pienso que la gente puede ver alguna conexión de mi álbum pasado al nuevo. Siento que esto es bueno, que la gente alcance a ver el desarrollo y pueda, todavía, reconocer la transición.

En Fixion, parece muy centrado en la reducción fenomenológica hacia el sonido. ¿Cómo cree que un elemento esencial se puede convertir en el inicio o fin de una exploración correcta?

Hubo algo que yo siempre había querido trabajar en este álbum, porque por un lado están estas canciones que escribo tradicionalmente, donde se refleja el trabajo que se hace con las voces y las vocales. En el otro lado, tengo las canciones que son mucho más experimentales y, a menudo, son instrumentales y son dos mundos que hacen parte de mí y mi estilo. Lo que realmente quería reflejar en el álbum, era la fuerza de estos dos elementos, pero que al mismo tiempo debía tener el peso del soundtrack. Lo bonito de lo instrumental es que no tiene vocales que le dicten un guión, porque la música habla su propio lenguaje. Por eso, la mitad del álbum tiene vocales y la otra mitad te invita a experimentar con las sensaciones del sonido instrumental.

¿Qué tan complejo fue producir y conectar la voz de Jehnny Beth con sus instrumentos, sonidos y estética musical?

La verdad fue algo muy sencillo, porque como mencione antes, ya había trabajado previamente con ella mezclando el álbum de Savages. Mientras trabajabamos, dijimos que podíamos en un futuro, grabar algo juntos. Y así fue, mi álbum requería de dos canciones con un tono áspero, así que no dude en mandarle los dos tracks y a ella le encantaron. Luego, fuimos a mi estudio en Copenhague, a trabajar en esas dos canciones cara a cara, y poder extraer algo de la esencia de la voz de Savages, para ponerla en mi universo y mi sonido. Todo fue demasiado divertido y desafiante para ella, y creo que por eso trabajamos tan bien juntos y logramos sacar esas dos canciones en dos días.

Acerca de la producción del disco, ¿cómo se relaciona con la noción del silencio? ¿Cuál es la importancia de la palabra «silencio» en la vida de Trentemøller?

En la producción de Fixion, trate de introducir más espacio, y en ese sentido quedaba más espacio para vocales, líneas melódicas en los sintetizadores o guitarras. Pero también trabajo en esos detalles. Además, adoro, que tú puedas experimentar cuando escuchas el álbum por la cuarta o quinta vez.

“Si escribo una canción que tiene sonidos más agresivos, seria genial ponerle sonidos electro postpunk; y si escribo una canción que es más melancólica o más trippy, debería tener una edición más suitcase sound”

En la composición de ‘River In Me’, ‘My Conviction’, y ‘Spinning’,  ¿cómo comenzó a integrar las grabaciones de campo en su trabajo?

No es algo que yo use muy seguido hoy día, pero es algo que usaba más en mis inicios… Lo siento, debo hacer otra entrevista. ¡Disculpa! Pero puedes enviarme las preguntas por correo, seguro las responderé.

Tranquilo, no hay problema.

Fue un placer hablar contigo.

Continuamos… ¿Y qué me dice de la colaboración con Marie Fisker? Ella siempre le ha inyectado su voz a la música de Trentemøller. ¿Se podría decir que su voz define un poco el rumbo de hacia dónde Anders quiere avanzar con la música y los artistas? Lo digo por sus constantes colaboraciones.

No, yo no diría eso, no solo compongo música con vocales. La mitad de mis álbumes son siempre instrumentales. Marie solo apareció una vez en mis últimos dos álbumes, pero dicho eso, su voz está en cuatro canciones de Fixion y obviamente, hace parte del sonido de este álbum.

¿Tiene una manera particular de componer o siempre está improvisando y probando cosas nuevas? Podría mencionar algunos procesos y cómo se logra un resultado agradable.

En realidad, la forma en la que trabajé la mayoría de canciones del último álbum, fue empezando a escribir las canciones en mi piano de ópera, ni siquiera en mi estudio… Realmente, me gusta que si la composición escrita de la canción es muy fuerte, puedo simplemente interpretarla en el piano o puedo sentarme y darle algo de música con una guitarra. Así es mejor porque me doy cuenta qué canción es tan fuerte para llevarla al estudio, mirar las posibilidades y los diferentes estilos musicales. Pero definitivamente, mi mejor manera de iniciar una canción, es con el piano.

En su nuevo disco se puede encontrar gran cantidad de sonidos mezclados entre texturas orgánicas y sintéticas que dan forma a la estética new wave, IDM e indie rock, estilo electropunk. ¿Cuál es su enfoque en eso y cuáles son sus opciones e intereses con respecto a la paleta de sonidos que utiliza?

Siempre trato de ser muy abierto a lo que cada sonido realmente demanda. Si escribo una canción que tiene sonidos más agresivos, sería genial ponerle sonidos electro postpunk; y si escribo una canción que es más melancólica o más trippy, debería tener una edición más suitcase sound. Todo depende de cómo es cada canción. Además, no trato de pensar en sonidos mientras estoy escribiendo. La verdad, trato de que cada sonido sea muy fiel a la naturaleza de cada tema; y después de eso me doy cuenta de qué sonidos podrían seguir luego de esa canción. Algunos de los temas que están en el álbum, les hice cinco o seis versiones, hasta obtener la definitiva, con la que me encuentro completamente satisfecho, entonces, algunas pueden ser electro, pero después no me siento feliz y trato de cambiarlo a un estilo más punk-rock.

Por último, ¿cómo cree que todos podemos contribuir a la expansión de la exploración del sonido?

Intentando diferentes cosas. Inclusive, no tengan miedo si suena una mierda. Un proceso creativo es siempre muy desordenado y poco bello de escuchar, pero es importante invertir mucho tiempo tratando de definir un sonido propio.

*Para mí, Fixion ofrece lo que algunos llaman ‘tiempo profundo’: es una clase de inmersión tranquila de vive rápido y sueña en serio. La música es asocial: un refugio de la música bulluciosa que te silencia el alma.