Estuvimos en Armando Records para ver a la gran Juana Molina.
Normalmente a los shows que he asistido en Bogotá, no he visto bandas que le abran al artista principal. Pero esta noche para mi fue la excepción. Llegué al lugar sobre las siete de la noche. La selección musical estaba genial y había ya buen ambiente, se mantenía el telón del escenario abajo mientras todos disfrutábamos la espera.
Comienza a sonar de fondo Obvs, de Jamie XX y había gente bailando con los ojitos cerrados. De repente se abrió el telón al momento en que la canción se detiene y ¡Boom! Comienza así sin anestesia la presentación de Ela Minus, los primeros segundos antes de reconocer Jamaica fueron confusos para todos, pues no hubo intro de que comenzaría la noche. La semana pasada no logré ver a Ela Minus en el Festival Hermoso ruido y quedé lamentándome por el hecho de que ella no vive en el país. Así que ayer cuando pude verla, me sentí bendecida (hahaha)
El show estuvo impecable, sólo había escuchado el sencillo que lanzó hace poco más de una semana, pero luego de ver el set completo, quiero que venga pronto un EP. Gracias Gabriela Jimeno por quedarte más tiempo en Bogotá regalándonos shows sorpresa.
Luego de Ela Minus, esperamos otro rato, comenzó Eras con bajito volumen mientras se abría el telón. Todos corrieron desde donde estaban para quedar amontonados frente al escenario. Estaba atónita durante las primeras canciones. Juana Molina es una genia, es una maestra y sus dos músicos son como sus alumnos. Así transcurrió la primera hora del show; canción tras canción sin escuchar ni una palabra de Juana. Por momentos era un poco intimidante, ya luego hasta hizo bromas y nos hizo reír.
El show se me hizo infinito y no en mal sentido, cuando tocan tantas canciones quedas como con pena de pedir otra. Fueron casi dos horas nonstop de Juana siendo increíble y de todos bailando como si no hubiese mañana.
Redacción y fotografía por: Carolina Leal Follow @mrmdsrflyng
