Texto por: Se bastián Barragán Follow @luvvdeluxe
Fotos por: Sebastián Pedroza Vera Follow @Cabronazo__
Llegó el último día del SOMA y después de la recalentada de motores que nos dimos en los días anteriores, este no fue la excepción a un increíble show de energía que se desató el sábado en el Metropol. La apertura a la velada corrió por parte de Nasser, banda de Marsella, Francia que inició la velada con uno de los dos shows en vivo de la noche. Su sonido es una mezcla extraña entre el indie rock con una propuesta más de sintetizador que de guitarra y vocal, en lo personal, puedo decir que fue un buen abrebocas para la noche sin mencionar que debió ir después del show que prosiguió.
En seguida se subieron a los decks los chicos de WWF, que dentro de lo que pude reconocer de su set sé que en algún momento sonó Mandarine Girl de Booka Shade, o alguna de las canciones de Movements. El resto de la música estuvo en ese plan, ni muy relajado, ni muy pesado, una presentación amena que nos recordó a esas noches en algún bar de moda de Bogotá.
Cuando Black Strobe subió al escenario, creo que fue el momento en el que el plato fuerte del último día del SOMA comenzó. Esta banda francesa, que es catalogada como electroclash (aunque muchos digan que ya murió el electroclash) con un sonido arroyador, una voz desgarrada, acompañada de guitarras rockanroleras fuertes y con acentos a rockabilly se tomó al público que a pesar de que la banda tenga un recorrido musical mucho mayor que la mayoría de bandas que se presentaron, no se sabía las canciones y parecía estar más impaciente por los invitados de después de media noche. Black Strobe enamoró a más de uno con su show robusto y después de una larga presentación, le dejó claro a Bogotá que por más de que digan que el género está muerto, sus influencias siguen alimentando una escena completa.
Después de estos veteranos del electroclash, se subió al escenario Panteros666, productor francés de techno que produce bajo el sello de Bromance Records que está al día de los sonidos del techno alrededor del globo. A pesar de haber sido un DJ set y de que Panteros666 lleve poco en la escena electrónica, mostró tener un vasto conocimiento de la escena techno actual. Durante todo su set, el público bailó y no paro de celebrar y por supuesto, los que ya son adeptos de este productor bailaron cuando su tema célebre My Baby-F16 sonó al que le adicionó más techno de Daniel Avery y siguió su velada manejando los decks con fluidez y cohesión.
Para finalizar la noche, el gran esperado por la mayoría de los asistentes de esa noche: The Hacker. Sin poder decir mucho más de lo que ya se sabe de este legendario productor francés, dejo en esta nota una impresión de cómo debería ser el set de un DJ: Destructivo, invasivo e intranquilizante. Así fue The Hacker puso en el cuerpo de los asistentes las vibraciones oscuras, una tras otra mezcladas a la perfección en canciones con su sello distintivo, reitrando que el electroclash sigue ahí. En sus canciones estaba la marca de todos aquellos que hicieron de esa gran escena: Ascii.disko, Terence Fixmer, The Horrorist, todos esos productores que influenciaron al techno que hoy mueve a tantas personas. En definitiva, The Hacker es un show que de ninguna manera debería perderse si se tiene la oportunidad de presenciar y sin más, se fue el último día de este gran festival que concluyó con una velada de los mejores sonidos de Francia.
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